“La necesidad de asegurar el desarrollo integral, la preparación para
participar activamente en la vida social y cultural, así como la formación para
la paz, la cooperación y la solidaridad entre los pueblos, como uno de los
fines que garantiza el Sistema Educativo”.
Si leer es uno de los
conocimientos más importantes de la vida, dado que prácticamente todo
aprendizaje se basa en la habilidad para leer, las Matemáticas tienen también
una importancia extraordinaria para el desarrollo nuestra sociedad y para
el desarrollo de la inteligencia.
- Sabemos que la capacidad de aprender de un
niño es asombrosa y que absorbe de manera extraordinaria información
de todo cuanto le rodea y en las condiciones adecuadas, las matemáticas
también. Puede y quiere
aprender matemáticas.
Los hechos son que los niños desean, pueden y
deben aprender matemáticas. El objetivo de los bits de matemáticas es ofrecer a los niños
principios abundantes y sistemáticos con el fin de estimular la capacidad
neurológica que necesitan para las matemáticas. Todos los sistemas del método de los Bits
de inteligencia y del de lectura Doman son aplicables al programa de
matemáticas:
La capacidad matemática se
adquiere con mayor facilidad a una edad muy temprana. Es más fácil enseñar
matemáticas a un niño cuanto mas pequeño es. Es urgente enseñar matemáticas cuanto antes a un niño pues la capacidad del
cerebro para desarrollar circuitos neurológicos específicos para el lenguaje
matemático se pierde con la edad de forma exponencial y a partir de los 7 años
desaparece totalmente.
La capacidad visual de los
pequeños es mucho mayor que la nuestra. Hasta aproximadamente los tres años son
capaces de distinguir un conjunto de cien puntos de otro de noventa y nueve.
Esta posibilidad de percibir diferencias entre los conjuntos más grandes va
disminuyendo rápidamente a partir de esta edad. Esta
capacidad visual es independiente de las funciones orales y escritas. Un niño
es capaz de apreciar cantidades antes de que aprenda a expresarlas oralmente y
a representarlas mediante símbolos.
Hay que proporcionarles estímulos
lo más eficaces posibles, es decir, basados en el proceso de desarrollo de su
cerebro que como se dijo en la lectura va de lo concreto a lo abstracto.
Por tanto, el aprendizaje del lenguaje matemático no puede empezarse con abstracciones como son los símbolos de los números sino con la observación de objetos concretos: los conjuntos de puntos de las tarjetas de matemáticas:
Por tanto, el aprendizaje del lenguaje matemático no puede empezarse con abstracciones como son los símbolos de los números sino con la observación de objetos concretos: los conjuntos de puntos de las tarjetas de matemáticas:
Así como en el idioma las
palabras evocan objetos, se pretende que también los números evoquen diversos
conjuntos de puntos, para que resulten significativos para los niños.
Más tarde, usando estos conjuntos
como referencia podrán entender fácilmente las representaciones numéricas
abstractas o generales.
Este método no excluye el empleo de otras técnicas; al contrario, es compatible con otros procedimientos como son los bloques lógicos, las regletas, el ábaco, los juegos de mesa y cualquier otra actividad que consideremos interesante para crear una mente matemática en los niños.
¿Pueden los niños pequeños
aprender Matemáticas?
Un equipo de pediatras
evolucionistas, médicos, educadores, ha llegado a sorprendentes conclusiones
sobre cómo aprenden los niños, qué aprenden y qué pueden llegar a aprender:
Cuando este equipo había visto
leer a muchos niños con lesión cerebral, y leer bien con cuatro o cinco años ha
constatado que algo iba mal con lo que les estaba sucediendo a los niños sanos.
Glenn Doman ha creado un método con el que tienen éxito en las Matemáticas los
niños con los que se ha probado. Este método ya ha sido utilizado y se utiliza
en muchas guarderías y centros de Educación Infantil en España y otros países
con resultados sorprendentes.
Por lo que se sabe hoy, como
fruto de casi cuarenta años de experiencia en los Institutos para el Logro del
Potencial Humano, por los testimonios de miles de profesionales de Educación
Infantil y por la experiencia de cientos de miles de madres de todo el mundo,
está más que demostrado que:
Los niños pequeños desean
aprender Matemáticas.
Aunque naturalmente ningún niño
desea aprender matemáticas hasta que sabe que éstas existen, todos los niños
desean absorber información acerca de todo cuanto les rodea y en las
circunstancias adecuadas. Las matemáticas incluidas. El proceso de aprendizaje en los
primeros años se desarrolla a una velocidad increíble. Un niño pequeño
tiene un ilimitado deseo de aprender.
Los niños pequeños pueden aprender matemáticas.
Los NIÑOS PEQUEÑOS pueden
aprender matemáticas de la misma forma que aprenden a leer. Y, cuanto más
pequeño sea el niño, más fácil es.
Es asombrosa la capacidad del cerebro de un niño. Todos los bebés son genios
lingüísticos. Todos los bebés pueden entender cualquier idioma extranjero antes
de los dos años de edad y con cuatro son capaces de hablarlo. Sólo han de estar
expuestos a él. La capacidad de leer es inherente al cerebro humano. Igualmente es inherente al
cerebro humano la habilidad matemática. Es más fácil enseñar matemáticas a un
niño de dos años que a uno de siete años de edad.
Las matemáticas sólo tienen diez
símbolos básicos llamados 1, 2, 3, 4, ,5, 6, 7, 8, 9 y 0.
“Puede enseñar a un niño pequeño
cualquier cosa que pueda presentarle en una forma honesta y objetiva” Los niños pequeños pueden
asimilar datos a la velocidad del relámpago si los datos se presentan de manera
precisa, distinta y verdadera. Y si a un niño se le enseñan los datos
matemáticos, él por sí descubrirá las reglas. El cerebro es un instrumento
mágico.
Existen dos razones por la que
los niños deben aprender matemáticas. La primera es obvia: es una de las
funciones más elevadas del cerebro humano y entre todas las criaturas del mundo
sólo los humanos pueden realizar operaciones matemáticas. Desde la infancia
hasta la vejez estamos obligados a realizarlas en todos los campos y en todas
las profesiones.
La segunda razón es todavía más
importante: los niños deben aprender matemáticas a la edad más temprana posible
debido al efecto que esto tendrá en el desarrollo físico del cerebro en sí y en
los frutos de ese desarrollo físico, que es lo que llamamos inteligencia.
Después de más de veinticinco
años de investigación en los Institutos para el Desarrollo del Potencial Humano
se ha descubierto que:
1. La función determina la
estructura.
2. El cerebro, al igual que otros músculos, se desarrolla con el uso.
3. El cerebro es el único recipiente que cuanto más se pone en él, más guarda.
4. Si se mejora alguna función del cerebro mejorarán todas las funciones.
5. La inteligencia es el resultado de lo que hacemos con el cerebro.
2. El cerebro, al igual que otros músculos, se desarrolla con el uso.
3. El cerebro es el único recipiente que cuanto más se pone en él, más guarda.
4. Si se mejora alguna función del cerebro mejorarán todas las funciones.
5. La inteligencia es el resultado de lo que hacemos con el cerebro.
Bases de la enseñanza.
¿A qué edad empezar?.
Cuanto antes. Al cumplir un año,
ya que, cuanto mayor sea, más dificultades encontrará.
Actitud y enfoque del enseñante.
Aprender es la aventura más
grande de la vida. La regla principal consiste en que ambos, enseñante y niño,
deben abordar alegremente el aprendizaje de las matemáticas como el magnífico
juego que es.
Aprender es una recompensa, no un
castigo.
Aprender es un placer, no una tarea.
Aprender es un privilegio, no es negación.
Aprender es un placer, no una tarea.
Aprender es un privilegio, no es negación.
Existe una ley que no falla y que
jamás se debe olvidar: “Si no está pasando un rato agradable cuando hace los
juegos, deténgase. Está haciendo algo mal”.
El mejor momento para enseñar:
los mejores y más felices momentos.
Las sesiones sólo durarán segundos.
Las sesiones sólo durarán segundos.
Preparación del material.
Esta es la parte más laboriosa
del método. ¡Imagínate tener que elaborar todas las cartulinas y pegar los
puntos sobre ellas! Nuestro programa evita este trabajo a todos los maestras,
maestros, madres y padres que deseen aplicarlo.
La manera de enseñar.
Tu entusiasmo es la clave.
A
los niños les encanta aprender y lo hacen muy rápidamente. Nosotros los adultos
hacemos casi todo demasiado despacio para los niños y no hay un campo donde se
demuestre de forma más dolorosa que en la forma como los adultos enseñan a los
niños pequeños. Generalmente esperamos que un niño se siente y mire fijamente
sus materiales, para que parezca que está concentrado en ellos. Esperamos que
tenga un aspecto algo infeliz para demostrar que realmente está aprendiendo.
Pero los niños no piensan que aprender sea doloroso. Los adultos sí.
El interés de tu alumno y el
entusiasmo por sus sesiones estará muy relacionado con estas tres cosas:
1. Las veces que utilices el
programa.
2. La velocidad de aprendizaje.
3. Tu carácter alegre.
2. La velocidad de aprendizaje.
3. Tu carácter alegre.
Una vez que empieces a enseñar
matemáticas a tu alumno, te darás cuenta que asimila muy deprisa. Recuerda que
el pecado capital es aburrir al niño pequeño.
Resumen: Los fundamentos de una
buena enseñanza
1. Empieza tan pronto como
puedas.
2. Está alegre mientras lo aplicas.
3. Respeta a sus alumnos.
4. Enseña sólo cuando ellos y tú estés contentos.
5. Detente antes de que el niño quiera detenerse. No lo aburras nunca.
6. Muestra el material con rapidez.
7. Sé sistemático.
8. Dedica el doble de tiempo a felicitarles que a enseñarles.
9. REGLA DE ORO: No examines nunca. A los niños como a los adultos no nos gusta que nos examinen.
2. Está alegre mientras lo aplicas.
3. Respeta a sus alumnos.
4. Enseña sólo cuando ellos y tú estés contentos.
5. Detente antes de que el niño quiera detenerse. No lo aburras nunca.
6. Muestra el material con rapidez.
7. Sé sistemático.
8. Dedica el doble de tiempo a felicitarles que a enseñarles.
9. REGLA DE ORO: No examines nunca. A los niños como a los adultos no nos gusta que nos examinen.
“La evaluación sólo motiva si se
tiene éxito”